¿Jugar a 30 FPS en 2023 no es el fin del mundo?

¡30 FPS en 2023! ¿Cómo es eso posible? ¿En la consola más poderosa de la actualidad! ¡Para un exclusivo de la plataforma?

Esas han sido sólo algunas de las exclamaciones de la comunidad gamer durante los últimos días, después de que se supiera que uno de los juegos exclusivos más importantes de 2023 para Xbox, Redfall, será lanzado solo con un modo calidad, es decir, no correrá a más de 30 FPS.

Como el videojugador empedernido que soy, entiendo la importancia de tener una experiencia de juego fluida y receptiva. Sin embargo, no creo que represente el fin del mundo, pero sí creo que esta decisión por parte de Arkane, revela serios problemas con el desarrollo del juego, de manera particular, y nos habla también de los procesos de desarrollo de manera general, sin mencionar las expectativas que tiene la comunidad gamer, y el manejo de las mismas, por parte de los equipos de marketing y comunicación de las desarrolladoras.

Jugar a 30 FPS en 2023 es algo aceptable

Primero, analicemos por qué jugar a 30 FPS sigue siendo aceptable en 2023. Según una pregunta frecuente de OSGamers, jugar a 30 FPS sigue siendo perfectamente aceptable para ciertos géneros, como juegos de rompecabezas o de estrategia, donde el ritmo es más lento, el tiempo de reacción es menor y, por tanto, no resulta crucial.

Si bien jugar a 30 FPS en 2023 puede no ser lo ideal, sigue siendo una experiencia “pasable” y, dependiendo del tipo de juego, es posible tener una experiencia de juego agradable.

Además, las consolas de juegos se han vuelto más poderosas, lo que permite a los desarrolladores ampliar los límites de lo que es posible. Sin embargo, esto también significa que desarrollar juegos que se ejecutan a 60 FPS o más, requiere más tiempo, recursos y optimización.

En algunos casos, puede ser necesario sacrificar FPS para lograr mejores efectos visuales u otras funciones de juego.

¿Qué problemas llevan a los juegos ofrecer solo 30 FPS en 2023?

El desarrollo de videojuegos es una de las tareas más complejas que existen en la actualidad: el talento del equipo debe ser excepcional, tiene que ser multidisciplinario (programadores, project y business managers, mercadólogos, recursos humanos, artistas, músicos, doblaje, traductores, testeadores, etc., etc., etc.), debe de contarse con amplias cantidad de dinero para que el proyecto no quede a medias, la organización debe ser casi perfecta, y, por si eso fuera poco, debe tenerse en cuenta a la competencia, y a una comunidad sumamente exigente y sensible.

Uno de los problemas para que sigamos viendo juegos a 30 FPS en 2023, es el tema de la optimización para diferentes plataformas de videojuegos. El bloqueo de 30 FPS de Redfall en las consolas Xbox destaca, y en especial en la Xbox Series X, resalta el hecho de que algunos juegos pueden no estar optimizados para diferentes configuraciones de hardware, lo que lleva a un rendimiento subóptimo

Además, la prisa por lanzar juegos en tiempos ajustados puede hacer que los desarrolladores tomen atajos en el proceso de optimización. Según un artículo de PC Gamer, la decisión de bloquear Redfall a 30 FPS se tomó para garantizar que el juego funcione sin problemas en las consolas Xbox menos poderosas, que no cuentan con el poder de procesamiento que la Xbox Series X, o una PC de gama alta.

Esto se resolvería con mayor tiempo de desarrollo, pero como sabemos, esta puede ser una decisión sumamente impopular entre la comunidad de videojugadores, sin mencionar que podría no ser la mejor decisión en términos de economía, ganancias y negocios.

Otro problema es la creciente complejidad del desarrollo de juegos. A medida que los juegos se vuelven más complejos, con mundos más grandes, gráficos avanzados y mecánicas de juego intrincadas, la optimización se vuelve más desafiante. Esto puede conducir a una compensación entre FPS y otros aspectos del juego, como la fidelidad visual o las características del juego.

Además, los desarrolladores de juegos se enfrentan a una batalla constante para mantenerse al día con las nuevas tecnologías y los avances de hardware. La carrera por crear los juegos más vanguardistas puede conducir a un desarrollo acelerado, lo que puede resultar en un rendimiento subóptimo o falta de optimización para diferentes plataformas de juego, como parece ser el caso de Redfall.

Así, se puede concluir, creo yo, que si bien jugar a 30 FPS en 2023 puede no ser el fin del mundo, sí revela serios problemas con el desarrollo del juego. La falta de optimización para diferentes plataformas de juegos, la prisa por cumplir con las fechas de lanzamiento y la creciente complejidad del desarrollo de juegos contribuyen a un rendimiento subóptimo y un FPS más bajo.

Todo lo anterior sin contar con un pobre manejo de las expectativas por parte del equipo de Arkane, que mostró avances del juego corriendo a 60 FPS. Si hubiesen anunciado, con mucha antelación, que el juego sería lanzado en modo calidad, y que en un update posterior se añadiría el modo performance para correr a 4K, 60 FPS, posiblemente otro gallo les estaría cantando.

Además, como mencioné al principio, los 30 FPS son bastante aceptables para ciertos tipos de juegos. Sin embargo, Redfall es un shooter en primera persona con veloces escenas de acción, y una necesidad de rápidos reflejos y reacciones todavía más rápidas. 30 FPS no son aceptables para un juego de este tipo, lamentablemente.

Como jugadores, debemos responsabilizar a los desarrolladores por brindar la mejor experiencia de juego posible. Esto significa optimizar juegos para diferentes configuraciones de hardware, priorizar FPS sin sacrificar otros aspectos del juego y tomarse el tiempo para garantizar que los juegos estén completamente optimizados antes del lanzamiento.

Gameplay de Redfall

Conclusión: ¿Aceptable o no jugar a 30 FPS en 2023?

De igual manera, las comunidades de videojugadores deben de dejar la toxicidad de sus comentarios, que llegan a ser violentos, racistas y amenazadores. Los desarrolladores son personas como nosotros, que requieren tiempos de descanso, y el derecho de vivir una vida laboral libre de violencia, tanto por parte de sus superiores, como de los fans, que muchas veces no pensamos en ellos sino como robots que deben de acabar un juego, totalmente optimizado, divertido y barato, en tiempo récord.

Ya para terminar, jugar a 30 FPS en 2023 puede no ser lo ideal, pero aún se puede jugar y puede brindar una experiencia de juego agradable. Sin embargo, como ya apunté, nos habla de serios problemas con el desarrollo de juegos, y un muy mal manejo de las expectativas de la comunidad.

Preguntas frecuentes sobre jugar a 30 FPS en 2023

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